La Trágica Historia del Castillo Egaña.

El Castillo San Francisco, también llamado por los habitantes de la región como Castillo Egaña, es un casco de estancia que se encuentra en cercanías de la Estación Egaña, perteneciente al Partido de Rauch, Provincia de Buenos Aires, Argentina.

Para quienes gustan de las salidas turísticas pero con historia propia, es un sitio para tener en cuenta, desde Rauch se llega tomando un camino de tierra que acompaña las vías del ferrocarril, unos 17 kilómetros hasta la Estación Egaña.

Los terrenos en los cuales se construyó la estación fueron donados para dicho fin por el estanciero Andrés Egaña, de allí el nombre de la estación ferroviaria, allá por los años finales del 1890.

Esos campos eran propiedad de la familia Egaña-Díaz Vélez, que estaban al sur de la antigua estancia El Carmen, propiedad del General de la Independencia Argentina Eustoquio Díaz Vélez, al que se lo llamaba también Eustaquio.

Dicha estancia se llamaba El Carmen en honor a su esposa, Carmen Guerrero y Obarrio.

El Castillo Egaña o Castillo San Francisco fue construido por un descendiente de Eustoquio, su nieto Eugenio Díaz Vélez, entre los años 1918 y 1930.

Para darse una idea de la real magnitud de este castillo o mansión construida por aquellos años, cuenta con 77 habitaciones, 14 baños y 2 cocinas, galerías, patios, terraza con miradores, y hasta su propio taller de carpintería.

Era considerada entonces como una de las más lujosas construcciones del interior de la provincia.

Dado los numerosos viajes de Eugenio a Europa, fue trayendo numerosos detalles de lujo para el castillo, por ejemplo, estufas labradas con detalles del viejo continente y mármoles de Carrara, los más buscados del oeste de Italia.

Comenzaron desde la muerte de Eugenio, el nieto del prócer argentino Eustoquio Díaz Velez, las penurias y maleficios para El Castillo de Egaña.

En 1930, el día en que se esperaba la inauguración oficial con cientos de invitados ya presentes en el lugar, esperando a Eugenio el anfitrión, la tragedia cambiaría la historia de la lujosa mansión.

En Barracas, el cochero de Eugenio lo fue a despertar para continuar viaje, momento en el cual lo halló muerto.

Según cuenta el relato popular acerca de aquel acontecimiento, la familia huyó despavorida del castillo lo mismo los invitados, ordenando no volver a pisarlo, quedando hasta cerca de 1960 el lugar cerrado y abandonado.

La gente de la zona al verlo abandonado, sin control fue robando de todo, muebles, adornos, piano, cuadros, canillas de oro, mármol de Carrara.

Heredado por su hija María Eugenia, la estancia fue expropiada por el Estado provincial en la década del 60, subastando los finos muebles y decorados, orden del entonces Gobernador Oscar Allende y su reforma agraria.

Desde allí en adelante, se instaló un orfanato, un hogar para jóvenes con problemas de conducta o delincuencia, siendo su administrador Eduardo Burg.

Burg tomó gran afecto por la propiedad, y llevaba adelante las funciones de director suplente del orfanato, hasta que uno de los jóvenes que egresaron del mismo, regresó como celador de la institución.

Pero en 1974, este joven asesinó de 7 disparos a Eduardo Burg, lo que provocó que nuevamente el castillo quedara cerrado y abandonado.

Según un cartel oficial, «Referencia Histórica», con un grave error ortográfico como puede leerse, actualmente la propiedad pertenece al Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires.

¿Cómo llegar al Castillo San Francisco o Egaña?

El viejo cartel del Castillo Egaña o Castillo San Francisco. y el nuevo cartel con su error de ortografía.

Desde el centro de Rauch son solo 25 kilómetros, como dijimos, se puede llegar bordeando las vías del ferrocarril, en media hora de viaje tranquilo por camino de tierra.

También si se llega por la Ruta Provincial 30, hay carteles en los que se señala donde desviar hacia el castillo.

Desde Tandil, son 60 kilómetros, desde Mar del Plata habrá que recorrer 250 kms., y desde Ciudad de Buenos Aires, por Ruta Nacional 3 y Ruta Provincial 30, son 300 kilómetros.

Comentarios

comentarios

Deja una Respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

*

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad