Muestra Gardel y los Deportes

Para que todos puedan ver en otra dimensión a la leyenda más grande del tango, hoy los invitamos a visitar la muestra Gardel y los deportes, exhibición que permite conocer otros aspectos de la vida del Morocho del Abasto, una muestra que reúne fotografías, documentos personales, discos, partituras, películas y objetos de época.

La muestra Gardel y los deportes está organizada en tres núcleos temáticos, que son el fútbol, el turf y otros deportes, ya que tal lo reconocido en su momento por Carlos Gardel, “…los burros, el fútbol y todos los deportes me atraen…”.

Gardel como deportista practicaba gimnasia, aerobismo, natación, bochas, pelota vasca y tenis, pero al mismo tiempo estaba fuertemente vinculado amistosamente con jugadores famosos de fútbol de aquellos años, boxeadores y por supuesto, jockeys como Leguizamo.

Entre los futbolistas que mantenían una amistad con Gardel podemos mencionar al jugador de Racing Club de Avellaneda, Pedro Ochoa, como a la gloria del F.C. Barcelona “el mago” Josep Samitier, de cuya amistad el Morocho tenía como recuerdo un balón del encuentro que el Barcelona perdió en Londres por 7 a 1 frente al Liverpool.

Dado que en 1930 se disputó el mundial en Uruguay, Gardel asistió a la final entre los dos rioplatenses, Uruguay y Argentina, con el resultado a favor de los locales por 4 a 2, que los consagrara campeones mundiales por primera vez.

Igualmente es sabido que a Carlos Gardel le apasionaban en primer lugar las carreras de caballos, y como muestra basta un botón dice el dicho popular. En 1917 recorría La Pampa con Razzano y la Orquesta de Firpo, en los mismos días que se corría en Palermo la denominada Carrera del Siglo.

Gardel volvió a Buenos Aires para estar en el Hipódromo de Palermo y presenciar el triunfo de Botafogo ante Grey Fox, la gran carrera de la época.

Por su amor al turf es que Carlos Gardel tuvo entre sus más entrañables amigos a otra leyenda, como lo es Irineo Leguizamo, y el entrenador de caballos Francisco Maschio, que entrenaba al caballo preferido del cantante, llamado Lunático.

Recorriendo el repertorio gardeliano, son muy reconocidos aquellos tangos turfísticos, como Leguisamo solo, Palermo, Bajo Belgrano, La catedrática, Soy una fiera, Polvorín, Uno y uno, o el mundialmente célebre Por una cabeza.

Gardel además fue socio del Club de Pesca y siempre encontraba tiempo para acudir con sus amistades a presenciar otro de sus deportes favoritos, como era el boxeo.

La muestra Gardel y los deportes puede ser visitada hasta el 31 de marzo de 2019, los lunes, miércoles, jueves y viernes de 11 a 18 horas y los sábados, domingos y feriados de 10 a 19 horas, en el Patio del Museo Casa Carlos Gardel, ubicado en la calle Jean Jaurés 735, barrio del Abasto.

El Museo Casa Carlos Gardel es donde el Zorzal vivió con su madre, y que fuera recuperada por la Dirección General de Museos, con la premisa de convertirla en un espacio que conserva, exhibe y difunde el patrimonio cultural que representa la obra de Carlos Gardel.

Entrada general: $30.-
Miércoles gratis.
Jubilados, estudiantes universitarios, personas de capacidad reducida y sus acompañantes, menores de 12 años, grupos de estudiantes de colegios públicos: sin cargo
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