Conversamos con los psicoanalistas y escritores Enrique Torres y Alexis Morales

Con gran expectativa, acaba de aparecer el segundo volumen de Che vuoi? Revisiones Lacanianas de los psicoanalistas Enrique Rafael Torres y Alexis Ariel Morales, editado por Hielo Nueve, Córdoba, Argentina. Ambos psicoanalistas son oriundos de la provincia de Córdoba, Argentina.

Durante cinco años de trabajo conjunto y continuo, Enrique Rafael Torres y Alexis Ariel Morales realizaron la revisión exhaustiva (que no se pretende, desde luego, completa) del grafo del deseo y de una buena parte de la enseñanza de Lacan.

Conversamos con autores para que nos cuenten todos los detalles de la novedad editorial.

—¡Felicitaciones por la publicación del libro! ¿Qué nos pueden contar sobre lo que se mantiene y lo que se diferencia del primer volumen de Che vuoi? Revisiones Lacanianas?

El objetivo ha sido profundizar el recorrido del Grafo del deseo ya iniciado en el volumen 1, dándole una densidad teórica y clínica que reafirma su validez como esqueleto del libro, sin olvidar que un cuerpo es más que un esqueleto. En el primer volumen fue necesario, para no desmerecer el valor introductorio que esta publicación puede prestar a muchos lectores, presentar un conjunto de conceptos claves, lo que nos llevó a detenernos cuidadosamente en los primeros desarrollos de Lacan: el estadio del espejo, los desarrollos del Seminario sobre la carta robada como uno de los lugares donde se despliegan magistralmente las primeras formulaciones de la teoría del significante, así como los lineamientos generales sobre los grafos que conducen, gradualmente, a la construcción del Grafo del deseo. En este segundo volumen, hemos destinado especial atención a los estamentos medio y superior del Grafo, concentrándonos en los conceptos de deseo y discurso del Otro, y a la articulación de los diferentes matemas y sus fórmulas, todo ello leído puntualmente desde los vectores y aristas que el mismo Grafo nos ofrece, algo no tan desarrollado en otras obras dedicadas al tema, ya que si bien la pulsión y el fantasma se encuentran en el circuito superior, al mismo tiempo que el deseo y el significante del Otro barrado, la idea de una articulación e inclusive la dinámica entre los mismos y su aplicación minuciosa a la clínica ha recibido de nuestra parte un detenido examen.

—Qué bien, y ¿pudieron vincularlo con la clínica?

Sí efectivamente, hemos contrastado los casos de Dora, el Hombre de las ratas y el mismo Hamlet, que Lacan trabaja en el Seminario VI El deseo y su interpretación, de modo de recorrer sus vicisitudes clínicas de la mano de los vectores y vértices del grafo. En los tres casos postulamos cuál sería la incidencia respectiva del “Che Vuoi?” como una brújula clínica esencial para adentrarnos en su lógica. No faltan, además, en el texto breves acotaciones sobre casos de nuestra propia práctica. Creemos y deseamos que quien lo lea, encuentre en todo ello articulaciones muy novedosas. 

—Una de las características del primer volumen era la articulación entre conceptos lacanianos y problemáticas o cuestiones sociales y culturales, ¿siguen manteniendo eso en el segundo volumen?

Si, absolutamente. En cada uno de los capítulos hay siempre una reflexión sobre alguna problemática social a la que el psicoanálisis puede echar luz; para nombrar solo algunas, la cuestión del fantasma que, como diría Freud, el neurótico suele tener bajo siete llaves, hoy ha trocado su secreto por una figuración indisimulada en la escena pública; algo que ha sido trabajado por Zizek y que nosotros desarrollamos extensamente. En el capítulo 12 y en razón de los desarrollos lacanianos en torno al cogito cartesiano, nosotros planteamos la problemática de la inteligencia artificial. También, como en el vol. 1, hay una articulación con la literatura, visitando algunos autores y conceptos, emulando en ello tanto a Freud como a Lacan. En el capítulo sobre la pulsión de muerte, por ejemplo, contrastamos este concepto freudiano con la maldición de la inmortalidad, apoyándonos en Borges y otros autores, y aún en el Génesis donde Caín es condenado, por el crimen de su hermano, a no morir nunca. Son referencias centrales para no ceder a los convencionalismos del sentido común -incluyendo al sentido psicoanalítico tradicional- frente a algunos impases que tiene el texto freudiano y que se zanjan con la lectura lacaniana de la pulsión. 

—Decían que el Grafo es el esqueleto del libro pero un cuerpo es más que un esqueleto, ¿en qué sobrepasa el libro ese objetivo principal que fue el tratamiento del Grafo? 

Diríamos que en muchos de los capítulos, si no en todos, tanto el tratamiento de lo siniestro en el capítulo 8 en relación al deseo del Otro, como lo que te decíamos antes en relación a la pulsión que es mortífera pero no muere. Hemos ahondado además los conceptos de alienación y separación, desde los primeros desarrollos que hace Lacan en el Seminario VI, que es cuando despliega totalmente el Grafo, pasando por el Seminario XI hasta llegar al XIV. Solo por dar un ejemplo, al concepto de holofrase utilizado por Lacan para pensar la psicosis y la debilidad mental, lo hemos articulado a Kant con Sade y a la referencia que Lacan hace en el Seminario XI sobre el Holocausto y el sacrificio a los dioses oscuros; por otra parte lo enlazamos con lo que Hannah Arent plantea sobre la banalidad del mal; es un desarrollo muy complejo que nos ha llevado muchas páginas y para el que el grafo resultó imprescindible para brindarle sin duda un cuerpo que la propia estructura lógica por sí mismo no posee. Para poner otro ejemplo, el concepto de objeto a, no esta expresamente formulado como realen el grafo, pero éste se enriquece muchísimo si en una lectura en retroacción, leemos el grafo a partir del objeto a. Concepto este último, lo mismo que el del sujeto, al cual le hemos dedicado muchísimo desarrollo, y que hemos tratado de plantear en todos los niveles posibles, desde el estadio del espejo, como objeto mirada, en el fantasma y en los desarrollos posteriores como objeto plus de gozar.

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Para quienes no hayan leído nuestra anterior entrevista publicada en Sobre Libros y Cultura, compartimos el link a la nota:

Ambos volúmenes de Che vuoi? Revisiones Lacanianas son muy recomendados para los amantes del psicoanálisis.

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