Reserva Natural del Bosque Mbaracayú
La Reserva Natural del Bosque Mbaracayú es una especie de paraíso, uno de los sitios con más diversidad biológica por su valiosa flora y fauna, afortunadamente protegido para evitar el ensañamiento humano visto tantas veces para contra el medio ambiente.
Selvas que ya no lo son, bosques que ya no lo son, humerales que ya no lo son, la humanidad con la bandera de la evolución ha destruido directa e indirectamente miles de reservas naturales en todo el mundo.
Lo que alguna vez llamamos, “Efecto Hombre”, con su máximo y mayor desastre ecológico: El Mar Aral, https://sobrelibrosycultura.com/mar-de-aral/ , sirva de muestra del freno que hay que poner a la sobreexplotación y a la desertificación que esta provoca.
Volviendo a esta Reserva Natural del Bosque Mbaracayú, está ubicada en Paraguay, a menos de 400 kilómetros de Asunción, la capital del país, protegiendo no solo la diversidad sino a las diversas comunidades naturales que en la región albergan en sus 64.406 hectáreas.
Para ubicarnos en el mapa, está localizada en el Departamento de Canindeyú, en la Región Oriental del Paraguay, en una zona entre las eco regiones de la Cuenca Alta del Río Jejuí y del Bosque Atlántico del Alto Paraná y la de Cerrados.
Esta área protegida, es administrada por la Fundación Moisés Bertoni, www.mbertoni.org.py y cuenta en su territorio, con una red de caminos internos y uno de ellos, el principal, corta geográficamente la reserva de Oeste a Este, uniendo la sede administrativa de Jejuí-mí con los Cerrados de Aguara Ñu en el Este.
Hay una ley que establece que los indígenas Aché, nativos del lugar, pueden cazar y recolectar en esta Reserva con sus armas ancestrales.
Acá se pueden encontrar especies que se encuentran amenazadas con la extinción en otras regiones, pero que gracias a la ceración de la Reserva, están presentes y en estado de hábitat original.
Entre ellas, se pueden encontrar yaguaretés, tapir o mboreví, oso hormiguero o yurumí, también el oso melero o kaguaré y el ave que es símbolo de la región, el Pájaro Campana llamado también Guyrá.
En cuanto al mundo vegetal, en la reserva se tiene un registro de 114 plantas de gran importancia, exclusivas de esta zona, únicas en el mundo.
Lo realmente especial de la Reserva Natural del Bosque Mbaracayú, es que en ella se puede interactuar directamente con sus principales atracciones, debidamente controladas por el Centro de Visitantes ubicado en Jejuí-mí.
Por su belleza, sonido y espectacularidad, hay un sitio que destaca en la preferencia de los turistas, es el Salto Karapá, (foto), que se encuentra ubicado en el extremo Noreste de la Reserva.
Hasta la base del salto se puede llegar mediante la utilización de una larga escalera de metal allí existente para tal fin, tras un sendero de 5 kilómetros, siempre hay que asegurarse las condiciones de los caminos previamente.
Cabe destacar que el Salto Karapá está al noreste de la reserva, en la denominada Cordillera del Mbaracayú, que es el límite natural del Paraguay con el Brasil.
Además, los turistas, locales e internacionales que lleguen para conocer y descubrir la reserva, cuenta con numerosas actividades, para que cada uno con sus posibilidades físicas y edades, pueda divertirse en este entorno natural.
Por ejemplo, se pueden realizar paseos en canoa por el Río Jejui-mí, también recorrer diversos senderos en el bosque, paseos en bicicleta, avistaje de aves, increíbles paseos nocturnos, pasear por la Cordillera del Mbaracayú contemplando el Salto Karapá desde el mirador del bosque.
La Cuenca Alta del Río Jejuí, que es área junto a la Reserva Natural del Bosque Mbaracayú, fue designada por la UNESCO en el año 2000, como Reserva Mundial de la Biosfera.
¿Cómo llegar a la reserva?
Desde Asunción, la ciudad capital del Paraguay, habrá que recorrer 375 kilómetros hacia el norte y el este, casi frontera con el Mato Grosso en Brasil, y desde otra ciudad fronteriza, Ciudad del Este son unos 320 kms.
Desde Posadas, en Argentina, pasando por el puente hacia Encarnación, Paraguay, son 500 kilómetros.
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