La Leyenda del Río Sligachan
Los Mc Donald y los Mc Cloud eran enemigos mortales, dos clanes que luchaban por el dominio de las tierras en la Isla de Skye, Escocia, y hoy para despejarnos un poco, les contaremos sobre la Leyenda del Río Sligachan.
Tanta lucha entre ambas familias durante años, durante generaciones, tuvo una pausa, ya que ambas familias llegaron a un acuerdo para terminar con tanta violencia.
El acuerdo consistía en que la hija del jefe de los Mc Cloud, llamada Mary, y John, hijo del jefe de los Mc Donald, se conocieran y en caso de atraerse mutuamente, pudieran llegar a casarse.
La verdad es que inmediatamente tuvieron atracción mutua, ya que ella era una mujer joven y hermosa, y él era un joven apuesto y muy educado.
Los preparativos para el casamiento fueron inmediatos, la felicidad invadió lo que antes era violencia y luchas sin cuartel, ya que entre los jóvenes nació verdadero amor.
Llegó el esperado día, el día de la boda en que John y Mary se casarían, y que las familias a través de ese matrimonio, terminarían con el triste pasado para unir las dos familias, los Mc Donald y los Mc Cloud.
John fue el primero en llegar a la iglesia, y esperaba por la llegada de su amada Mary, que estaba atrasada para estar brillante en el día de su boda, a la que iría caminando por la cercanía de la iglesia.
Mientras la novia caminaba solo pensando en el futuro de amor y felicidad que la esperaba, un carro a toda velocidad no pudo frenar ante ella, el caballo se colocó en dos patas, golpeándola con sus patas delanteras en el rostro.
El golpe la desfiguró, su boca sangrando, sus ojos lastimados, la cara con profundos cortes, y la sangre manchando todo su vestido blanco.
Al mirar su reflejo en las aguas del Río Sligachan, bajo el puente, el agua cristalina reflejaba su actual fealdad, nada quedaba de su belleza, y estando segura que su amado John no la querría así, se puso a llorar.
Apareció un duende, que consolándola le dijo, que si John Mc Donald la amaba realmente, vería su belleza interior sin importarle la apariencia física.
Corrió entonces hacia la iglesia, siguiendo el consejo del duende, y al tomarse de la mano con su amado, John la miró, el vestido lleno de sangre, le levantó el velo, y se horrorizó por el rostro de Mary Mc Cloud.
Nada quedaba de la belleza de su amada, pensó en una trampa de la familia rival, y se alejó de la iglesia.
Así, la tregua entre familias terminó, volviendo a la violencia que durante años fue su único motivo de vida, la lucha por las tierras entre las dos familias.
Mary volvió a llorar al río, por ser fea John ya no la quería, y de repente apareció nuevamente el duende.
Este le dijo que había una forma de recuperar su belleza, sumergiendo su cara por 10 segundos en las claras aguas del Río Sligachan, sería tan hermosa o más que antes del accidente, y su belleza sería eterna.
Así fue, Mary recuperó no solo su belleza sino que ahora poseía el don de la juventud eterna, por lo que corrió nuevamente al encuentro de John, quien al verla tan deslumbrante, la tomó de la cintura para besarla.
Mary se soltó, y se distanció, ya que si él no había podido ver su belleza interior, jamás la había amado.
Así, Mary abandonó a John, y durante años y años ambas familias, los Mc Donald y los Mc Cloud, continuaron matándose en una lucha por las tierras en la Isla de Skye.
Dicen que ante esta leyenda, mucha gente que llega hasta allí, prueba sumergiendo durante 10 segundos la cara en el Río Sligachan, intentando poseer la eterna juventud.
Para quienes lleguen a la isla, además de conocer los sitios de la leyenda del Río Sligachan, de John y Mary, podrán recorrer sus hermosos paisajes, y parte de su historia.
Sumergir la cara en el río durante 10 segundos, es opcional.
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