Dos Días Caminando Por Madrid. (parte 1)

Nuestra sección de Turismo Cultural recibe habitualmente consultas sobre sitios de interés en diferentes ciudades, hoy nos detendremos en Madrid, la Capital de España, pudiendo dar nuestras opiniones muy personales sobre todo lo que puede recorrerse en dos días caminando, para que cada rincón imperdible o escondido en el centro de la ciudad pueda ser descubierto.

Llegamos muy temprano a Atocha, la principal terminal ferroviaria de Madrid, en plena temporada de fiestas navideñas, y en la previa de año nuevo, por lo que no solamente encontramos a los madrileños en sus días de compras, sino al turista nacional e internacional que llegaba para pasar las fiestas en familia.

El resultado, un verdadero volcán de gente por todas las calles, en cada plaza y en cada sitio de interés turístico, por lo que nuestra elección de un hospedaje sobre Calle Mayor, entre Plaza Mayor y Plaza Puerta del Sol, fue altamente recomendable, para caminar y caminar, ya que el tránsito era bastante caótico.

Rápidamente nos aconsejaron un buen lugar para desayunar sobre calle Mayor, los clásicos churros y chocolate caliente, para que los 5 grados de temperatura no se sintieran, siguiendo luego hacia nuestro primer objetivo, Plaza Mayor.

Plaza Mayor, antiguo mercado central, estaba invadida de gente, y con puestos netamente navideños, adornos, regalos, pinos y luces, y un enorme árbol navideño, dejaban poco espacio para más, aunque respetando las cercanías de la estatua de Felipe III, ubicada en el centro de la plaza.

Con comercios en todo su perímetro, es sin dudas uno de los puntos de interés turístico y de reunión más emblemáticos de Madrid.

De allí, seguimos con nuestra caminata, hacia la Catedral de la Almudena, ubicada frente al Palacio Real, y a la cual se puede ingresar hasta sus terrazas y recorrer su museo abonando una entrada.

Muchísimas reliquias religiosas excelentemente preservadas pueden ser apreciadas en su interior, y desde sus terrazas, que orientan hacia los 4 puntos cardinales y donde hay imágenes de los 12 Apóstoles, se obtienen excelentes vistas del Palacio Real y de gran parte de Madrid.

Su puerta principal está orientada frente al Palacio Real, aunque el público ingresa mayoritariamente por la puerta que da a la calle Bailén, enorme puerta en la cual se destacan los trabajos sobre relieve, donde se identifican perfectamente a los Reyes Juan Carlos y Sofía y al Papa.

Luego de recorrer la Catedral por dentro, ascender a las terrazas y visitar los niveles correspondientes al museo, y dada la cantidad increíble de gente haciendo la fila en el Palacio Real, optamos por seguir nuestro camino, por la calle Bailén hacia la Puerta de Toledo, una de las puertas de ingreso a Madrid en la antigüedad, levantada en honor al rey Fernando VII en el siglo XIX.

Luego retomamos la Calle Toledo, que nos llevaría nuevamente hacia Plaza Mayor, fue imposible conseguir un lugar donde almorzar por la cantidad de turistas, seguimos hacia la Plaza Puerta del Sol, la tradicional plaza donde se ubica la escultura de Carlos III en su caballo, y la del Oso y el Madroño, (foto de portada), al cual hay que tocarle el talón para tener suerte y volver a Madrid.

La Plaza Puerta del Sol es la más emblemática de fin de año, donde llegan miles de madrileños y turistas para recibir el nuevo año, comiendo las tradicionales 12 uvas.

Hay que estar atentos, ya que la plaza es desalojada por completo 3 horas antes de la medianoche, para controlar el aforo a la misma, cerrándola literalmente una vez completado el mismo.

Misión imposible fue comprar algún postre en La Mallorquina, de los que se exhibían tentadores en sus vidrieras, ya que lo habitual a cualquier hora eran filas de 50 metros para ingresar, justo frente a la Plaza del Sol.

Tomamos la naciente Calle de Alcalá, mapa en mano, sabíamos que llegaríamos a la conocidísima Puerta de Alcalá, y con suerte, alejándonos del centro, tal vez conseguiríamos un lugar para almorzar.

Al fin llegamos a la Puerta de Alcalá, ubicada junto a la Fuente de Cibeles y el Parque del Retiro, en la Plaza de la Independencia, una de las 5 antiguas puertas de acceso a la ciudad, y uno de los puntos impostergables en nuestra recorrida del primer día en Madrid.

La Puerta de Alcalá fue el primer Arco del Triunfo construido, incluso más antiguo que el Arco del Triunfo de París, y sobre ella se encuentran 4 esculturas, correspondientes a La Fortaleza, La Justicia, La Templanza y La Prudencia.

La temprana noche en el comienzo del invierno madrileño nos hizo comenzar el retorno, para llegar a nuestro hotel, y prepararnos para la cena, no sin antes recorrer la feria de puestos artesanales ubicada cerca de Plaza Independencia, gastronomía dulce, joyería y artesanías para todos los gustos.

Y nos quedaba un día más entero en Madrid, para caminar y conocer la mayor cantidad de lugares de interés turístico, aunque sin dudas, nos quedará sabor a poco, por lo que desde ya, la recomendación es que 2 días en Madrid, no son suficientes.

Les dejamos algunas de las fotografías que tomamos durante ese día, y los invitamos a seguirla en la segunda parte de nuestra nota de viaje.

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