Ruta de los Faros Bonaerenses
Nos lanzamos a La Ruta de los Faros Bonaerenses, a recorrer estos hitos históricos que tantos naufragios evitaron, alertando con sus haces lumínicos intermitentes a las embarcaciones que se acercaban a costas argentinas de los peligros cercanos.
De norte a sur, el primero de los faros que mencionaremos es el Faro Punta Piedras, habilitado en 1917, cuya torre de 31 metros de altura está pintada a rayas alternadas blancas y anaranjadas, siendo su ubicación es en la Estancia Rincón Grande.
Iluminando con destellos cada 9 segundos desde la punta norte de la Bahía Samborombón, habiendo estado fuera de servicio a causa de una fuerte tormenta en el año 1975, volvió a funciones en 1983.
Siguiendo al sur con nuestra Ruta de los Faros, justamente en el otro extremo de la Bahía, nos encontraremos con el Faro San Antonio, en Punta Rasa y cercano a la localidad de San Clemente del Tuyú.
Desde 2015 ha sido declarado Monumento Histórico Nacional, su altura es de 63 metros, y es un faro al cual puede ascenderse por un ascensor panorámico.
Siguiendo al sur, al igual que el anterior, la estructura del Faro Punta Médanos de 63 metros de altura, puede apreciarse mientras se viaja por la Ruta 11 o Interbalnearia, entre Mar de Ajó y Pinamar.
Llegó a Buenos Aires desde Francia desarmado, y se trasladó a su posición final por medio de carretas parte por parte, estando en operaciones en el año 1893, y al igual que el anterior, fue declarado Monumento Histórico Nacional.
Pasando 10 kilómetros al sur de Villa Gesell y Mar Azul, y avanzando por la playa, se llega a la nueva escala, el Faro Querandíes, el segundo más grande del litoral argentino, inaugurado en 1922, ubicado en la denominada Reserva Dunícola Faro Querandí.
A este faro se puede ascender por una escalera interna en caracol que no es apta para cualquiera, 54 metros y 274 escalones hay que subir para tomar las mejores fotos desde allí arriba.
El Faro Mar Chiquita funciona desde 1931, aunque en 1969 se reemplazó por el actual en forma de antena de 19 metros de altura, fuera de lo común sobre los anteriores mencionados.
Está 30 kilómetros al norte de Mar del Plata, y en su entorno se ha destacado información de su historia para los visitantes.
Pasando Mar del Plata al sur, llegaremos a uno de los más famosos por ser ícono de la Ciudad feliz, el Faro de Punta Mogotes, (foto portada), ubicado en un predio donde además se pueden apreciar diferentes piezas de museo de meteorología.
Es de los más antiguos de todo el país, (año 1891), mide 35 metros de altura, y una escalera caracol interna de 154 escalones, pero no se puede subir hasta su linterna.
El Faro Miramar, si bien su fecha de inicio es 1929, a la antigua estructura se la reemplazó en 1988, el faro se instaló entonces en la terraza del edificio Playa Club, sobre una torre de 1,40 metros de cemento.
Seguimos hasta la costa de Necochea y Quequén, donde se ubica el Faro Quequén con su torre de 34 metros de altura, pero más elevado gracias a que está construido a 64 metros sobre el nivel del mar.
Comenzó a funcionar en el noviembre de 1921, está ubicado en calle 541 entre 514 y 516, el predio puede visitarse pero no así el faro propiamente dicho.
En 1922 comenzó a funcionar el Faro de Claromecó, en las playas del sur de la Provincia de Buenos Aires, Partido de Tres Arroyos, con sus 54 metros de altura es uno de los símbolos de la ciudad.
Está a solo 2 kilómetros de la ciudad, a su parte superior se llega luego de subir los eternos 278 escalones en caracol, lo que lo hace no apto para todo público.
El Faro Recalada a Bahía Blanca es la siguiente escala de los faros bonaerenses, en el Partido de Monte Hermoso, construido y puesto en servicio en el año 1906.
Todos sus elementos fueron traídos desde Francia por la empresa que construyó la Torre Eiffel, y ensamblados en los terrenos que pertenecían a la Estancia El Recreo Viejo, cedidos para su construcción.
Cuenta una escalera interna de 327 escalones, pero el ascenso no está permitido al público en general.
El Faro Rincón, cuya torre es una estructura de hormigón armado, con sus 62 metros se encuentra entre las más altas del mundo, es el segundo faro más alto de Sudamérica.
Está ubicado en la Península Verde, entrada a la Base Naval Puerto Belgrano y a Bahía Blanca, en el sur de la Provincia de Buenos Aires, en los terrenos que fueron cedidos por Don Adolfo Luro para su construcción.
Y llegamos al final de nuestra Ruta de los Faros Bonaerenses, con el Faro Segunda Barranca, cerca de Bahía San Blas, tiene una torre troncopiramidal de 34 metros de altura, y para llegar arriba hay que subir 143 escalones en caracol.
Si esta Ruta de los Faros de la Provincia de Buenos Aires, la iniciáramos en la Ciudad de Buenos Aires, habrá que recorrer prácticamente 1600 kilómetros buscando siempre las mejores opciones de carreteras.
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